Un templo que data desde 1032, (aunque los conocedores dicen que desde antes ya existía otro templo ahí), alberga una de las más extrañas figuras de la cristiandad. Una imagen tallada en madera representando al Arcángel Miguel.
La diferencia es que este, en vez de portar espada, porta la cruz. Pero lo más extraordinario, es una especie de escafandra en su cabeza. Como un si fuera un antiguo astronauta.
Esta figura tallada en madera(madera aún no reconocida), guarda un sinfín de misterios. Nadie sabe quien la creo, ni las circunstancias, ni tampoco porque se representa así al arcángel.
A esto se suma la aparición de una fotografía hecha por un turista, tomada en el interior del templo, en el que una mancha de humedad sobre sus muros,da la forma de un ángel volando.
Todo este misterio, que guarda San Miguel de Alarar, hace de este lugar un lugar enigmático y hermoso. Para disfrutar en una vuelta a España.
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